Santiago espera un verano cada vez más caliente: “Los récords de temperaturas se romperán”

El climatólogo del Grupo Antártica y la Universidad de Santiago de Chile, Raúl Cordero, adelanta que los veranos serán violentos en términos del aumento de la temperatura y que la situación será irreversible.

¿Cómo será el verano en Santiago? Los próximos años serán especialmente secos y con aumentos cada vez mayores de la temperaturas, donde se romperán todos los récords. (MARCELO HERNANDEZ/ATON CHILE/MARCELO HERNANDEZ/ATON CHILE)

Si la actual primavera más fría y lluviosa que estamos viviendo en la zona central y el hecho de que Santiago esté a un milímetro de alcanzar cifras de precipitaciones de un año normal ilusionan a muchas personas, lo correcto es decir que la única esperanza que puede haber en estos momentos solo pasa por “tratar de que el futuro no sea tan malo”.

Esta última declaración es del climatólogo del Grupo Antártica y de la Universidad de Santiago de Chile, Raúl Cordero. Este equipo de investigación tiene una misión clara: “estudiar los efectos del cambio climático en el hemisferio sur, y en particular la influencia de la Antártida en el clima global”, según se lee en el sitio web de la entidad de la Usach donde participan varios científicos.

El especialista aborda en conversación con En La Hora la actualidad climatológica de la zona central del país. Señala que claramente, los aumentos en la temperatura serán cada vez más frecuentes y apunta, respecto de la constante pregunta sobre si este verano Santiago tendrá temperaturas de 40 grados o más, que esto ocurrirá más temprano que tarde.

También aclara que el Fenómeno de El Niño ha permitido un respiro en 2023 con un invierno lluvioso y una primavera menos seca que lo normal, pero que la hoja de ruta del cambio climático nos llevará a años más bien secos.

El climatólogo Raúl Cordero, comenta cómo serán los próximos veranos en Santiago y la zona central del país.
El climatólogo Raúl Cordero, comenta cómo serán los próximos veranos en Santiago y la zona central del país.

Prolongación del Fenómeno del Niño y temperaturas récord que se romperán

La Organización Meteorológica Mundial anunció que El Niño se prolongará ¿Qué efectos podría tener esto para Chile en un periodo donde ya estamos entrando al verano?

“Los efectos de El Niño en el verano son empujar la temperatura al alza, así que lo más probable es que tengamos un verano muy caluroso, y como las temperaturas altas favorecen la propagación de incendios forestales, lo más probable es que tengamos una temporada de incendios muy activa. Por otro lado, como El Niño probablemente se prolongue durante la primera mitad del próximo año, es posible que el otoño sea, por un lado, cálido, pero por otro podría ser algo más lluvioso que los últimos, que han sido extraordinariamente secos. El Niño empuja las precipitaciones al alza y quizás el próximo otoño no sea tan seco, vamos a ver”, dice.

El último verano europeo dejó imágenes que alertaron a los chilenos, y por supuesto, a la comunidad científica. Olas de calor de tres o cuatro días con temperaturas de 40 grados o más, causaron estragos, e incluso muertes. Estas últimas, no solo por el efecto del calor, sino también por incendios forestales que azotaron a España, Grecia e Italia.

Desde ese momento, la pregunta se comenzó a esparcir: ¿Podrá pasar que Santiago y otras ciudades de la zona central tengan olas de calor con temperaturas sobre los 40°? De momento, solo queda esperar, pero Cordero indica que “las temperaturas son siempre relativas. Las del sur de España, por ejemplo, no son las mismas que nosotros esperamos tener en Santiago. En España tener 40 grados no es extraordinario, en cambio en Chile, solamente en algunas ciudades del país han registrado esos números en ocasiones y en muy contadas ocasiones”.

Raúl Cordero, experto en cambio climático.
Raúl Cordero, experto en cambio climático.

Sin embargo, deja claro que hay una realidad que es indesmentible a estas alturas. “Si el récord de temperatura en Santiago es 38 grados que se estableció en el 2019, ese récord podría caer. Si no cae este verano, va a caer en un verano próximo”.

¿Todo esto es efecto del cambio climático, por supuesto?

“El alza de la temperatura promedio, lo que nosotros llamamos solamente calentamiento global, explica por qué los récords se rompen de forma cada vez más frecuente. Así que el récord de Santiago podría caer, y luego ese nuevo récord volverá a caer. La moraleja es que lo más probable es que en Santiago se registre una temperatura de 40 grados, cosa que nunca ha sucedido. Si no es esta década, será la próxima, pero son récords que desafortunadamente van a caer pronto”.

¿Cómo será el verano en las zonas costeras?

El destino lógico, y favorito de los chilenos en verano es la costa. Tanto los balnearios de la zona central como los del norte del país, suelen llenarse de turistas desde fines de diciembre hasta los primeros días de marzo, incluso.

Frente a esto, el climatólogo e investigador de la Usach confirma que las temperaturas en la costa también deben tender a subir. “Hay que buscar el récord de Viña, por ejemplo, no lo tengo en la cabeza, pero esos récords de Viña, que tampoco deben ser muy viejos, ya que todos los récords en Chile son de 2017 en adelante, si no caen este verano, van a caer el próximo, porque, como te digo, eso es una señal inequívoca de la tendencia al alza de la temperatura global”.

Lo mismo pasará también en aquellas zonas más del interior, donde sí es más normal que existan temperaturas en torno a los 40°C. “Si el récord es 40, ese récord va a subir”, comenta el especialista.

Y por último, y nuevamente tomando como espejo el reciente verano europeo, que además del calor extremo, también dejó algunos temporales muy violentos en España o Italia, Raúl Cordero descarta que algo así pueda ocurrir en Chile.

“Chile central es seco, pero siempre existe la posibilidad de que haya un temporal. Sin embargo, para nosotros el problema principal del verano va a ser el de las temperaturas altas y las bajas precipitaciones. Eso es una combinación, un coctel que es potencialmente explosivo. Hay chances de que este verano, enero o febrero, sean tan malos como en febrero pasado tuvimos mucho incendio”.