Comprar frutas y verduras en ferias libres o en centros agrícolas como La Vega y Lo Valledor, es una práctica esencial tanto desde la perspectiva de la salud como desde la perspectiva de apoyo a la economía. Estas ferias son conocidas por ofrecer productos frescos y de alta calidad directamente de los agricultores locales. Al comprar en estos mercados, los consumidores tienen la garantía de obtener alimentos frescos, cultivados en la región y recolectados recientemente, lo que se traduce en un mayor valor nutricional y sabor.
Además de la calidad de los productos, comprar en ferias contribuye al sostenimiento de la economía de las comunidades circundantes. Al apoyar a los agricultores locales, se fomenta el crecimiento de pequeñas empresas y se generan empleos en la zona. Las ferias fomentan la conexión entre los consumidores y los agricultores, los compradores pueden obtener información directa sobre la procedencia y la calidad de los productos que adquieren, y esto crea un ambiente de confianza y transparencia en la cadena de suministro de alimentos.
Aunque todo esto sea tan beneficioso tenemos entre manos el problema de los precios. Las alzas en los valores de productos como las papas, el pimiento, los zapallos y choclos generan incertidumbre, ya que se necesita más dinero que antes para comprar los mismos kilogramos. Te contamos que se puede esperar de esta situación en los meses venideros.
¿Cómo van a estar los precios de las frutas y verduras en los próximos meses?
Arturo Guerrero, dirigente y vocero de La Vega, nos comenta: “Yo creo que los valores de la fruta se van a mantener por ahora, pero hay que recordar que los primores duran poco, no más de 15 días. Después de eso, nos quedamos con las sandías y melones, que hoy en día tenemos mucha producción, como en Arica y también en Perú que está trayendo hacia Chile estos productos”.
Arturo también nos comenta que “hay harta agua porque llovió, por lo tanto se va a sembrar de todo pronto y no debería haber escasez en los próximos meses. Lo que sí va a seguir caro es la papa, producto de que la cosecha se demora sobre 6 meses”. Respecto a los precios elevados del tan necesario zapallo camote, “Don Arturo” nos recuerda que “recién están plantando zapallo de nuevo, lo que se vende es de lo que quedaba, entonces hay poco y el que se usa para el charquicán y los porotos ya tiene un valor más elevado”.
¿Y los pimentones? Este producto que queda bien con todo también se ha visto bastante afectado por el alza, y las “caseras” y “caseros” a menudo no encuentran valores accesibles. Al respecto, el vocero de La Vega nos comenta: “Recién se está terminando la cosecha de pimentón aquí en la Región Metropolitana, casi todo el que estábamos comprando lo traían de Arica y por eso había poco, por el precio elevado”.
¿Qué pasa con las papas y los tomates?
Las papas mayo y el tomate a la chilena van de la mano, pero con los precios actuales difícil poner ambos platos sobre la mesa los domingos. Guerrero explica que “en la papa y el tomate hay un problema de baja producción, por lo que los precios se van a mantener elevados por lo menos por seis meses, porque además no es llegar y preparar la tierra, hay que sacar esos costos que a veces son muy altos y no conviene”, y además recomienda aprovechar otros productos de esta temporada como " las frutas de estación; el damasco y el durazno”.
Nos asegura también que el limón, el tan preciado cítrico, se va al alza en poco tiempo más, igual que la naranja, la manzana y las frutas de invierno en general. A esa lista se suma el zapallo italiano, que pronto se verá en reflejado en la lista de los productos que subieron su valor este año.