Cruzaron la cordillera como turistas y llegaron a la ciudad de Buenos Aires. Pero su plan no era pasear por la capital argentina: habían viajado desde Chile para robar camionetas 4x4 estacionadas en la vía pública y, durante 35 días, lo hicieron sin inconvenientes, al menos 16 veces.
Los primeros robos ocurrieron en el barrio de Saavedra, pero su actuar delictivo continuó en Villa Devoto, Monte Castro, Villa Real, La Boca, Mataderos, Caballito y Villa Luro. La organización criminal tenía una peculiaridad: los vehículos sustraídos siempre fueron de la misma marca y modelo: Nissan Frontier.
Según informa La Nación de Buenos Aires, la “banda de la Frontier” actuó entre el 1 de junio y el 5 de julio pasados, hasta que sus integrantes fueron detenidos después de una investigación que incluyó, por parte de detectives de la Policía de la Ciudad, el análisis de las imágenes de 2.200 cámaras de seguridad.
Once sospechosos, diez chilenos y un argentino, fueron procesados con prisión preventiva por integrar una asociación ilícita, resolución dictada por el juez Alberto Baños.
La decisión de primera instancia ya fue confirmada por la Sala I de la Cámara del Crimen, integrada por los jueces Mariano Scotto y Pablo Lucero. En la pesquisa participó el fiscal José María Campagnoli con su equipo de colaboradores.
La sospecha de los investigadores, según explicaron fuentes judiciales y policiales, es que las camionetas 4x4 sustraídas en la ciudad de Buenos Aires tenían como destino, después del cambio de la chapa patente y del número de chasis, el territorio paraguayo, tras cruzar la frontera por Misiones.