Las Fiestas Patrias están próximas a llegar, y con ello, la ilusión de millones de chilenos por recibir el esperado aguinaldo dieciochero. Sin embargo, no todos quienes están en el mercado laboral podrán recibir un monto extra a su sueldo, ya que no existe una ley que obligue al sector privado a hacerlo.
Por ahora, en Chile solo reciben aguinaldo por ley las personas que se desempeñen en el sector público, lo que está contemplado en sus contratos, además de los pensionados. Para el primer grupo, los valores a recibir son: $81.196 para trabajadores con una remuneración líquida de agosto del 2023 igual o inferior a $943.703 y $56.365 para quienes reciben una remuneración superior a esa cantidad.
Por su parte, los pensionados cobran $23.261, valor que se incrementará en $11.931 por cada persona acreditada como carga familiar. Sin embargo, la idea de un grupo de parlamentarios oficialistas, es que estos grupos sean reforzados y todos los trabajadores y trabajadoras, puedan optar a este beneficio para los días de celebración.
Quienes están detrás de la iniciativa son Carolina Marzán (PPD), Helia Molina (PPD), Maite Orsini (RD), Marisela Santibáñez (PC) y Gael Yeomans (CS) Juan Santana (PS), Tomás De Rementería (PS) y Andrés Giordano (RD).
Una ayuda para el bolsillo de los chilenos
La diputada Marzán, una de las impulsoras de la idea del aguinaldo obligatorio sostuvo que el proyecto presentado “es una ayuda para el bolsillo de las y los chilenos, toda vez que cada conmemoración de fechas especiales generalmente incurre en gastos extras y aunque no lo hagan el hecho de tener la seguridad de que en ciertos meses del año podrán recibir un aumento en sus ingresos, es posible que permita cierto descanso ante las presiones económicas que muchas familias viven”.
Por su parte, Juan Santana fue enfático en indicar que la que se pretende es “establecer la obligatoriedad de los aguinaldos en los trabajadores del sector privado”.
Finalmente, a través de la red social X, Andrés Giordano, manifestó que “presentamos un proyecto para hacer obligatorio el pago de aguinaldos en el sector privado, que actualmente dependen de la voluntad del empleador, garantizándolo como un derecho. Esto va en línea con el proyecto que presentamos en mayo, para buscar mecanismos de reajuste anual de los salarios de este sector”.