El padre de Nicolás Zepeda, Humberto Zepeda, se refirió al juicio de apelación que enfrentarán y entregó algunos argumentos para demostrar la supuesta inocencia de su hijo.
Cabe recordar que este martes 21 de febrero comienza el juicio de apelación en Francia, luego que Nicolás Zepeda en 2022 fuera declarado culpable del asesinato premeditado de su expareja, Narumi Kurosaki, donde además se decidió que deberá pagar más de 114 millones de pesos a la madre y a las hermanas de la víctima, junto con otros 4 millones de pesos al exnovio de la fallecida.
En entrevista con TVN, Humberto Zepeda declaró: “Seguimos muy convencidos de que se está culpando a la persona equivocada en este lamentable caso. Nicolás es absolutamente inocente de lo que se le culpa”.
¿Qué dijo el padre de Nicolás Zepeda?
Al ser consultado sobre la decisión de apelar a este dictamen, el padre señaló que su hijo “no ha cambiado una letra respecto a lo que viene diciendo desde hace 6 años. Y la persona realmente responsable de este hecho está libre caminando por alguna calle en Francia o en otro lugar”.
“Existen muchos detalles del caso que la opinión pública desconoce. Recordemos que lamentablemente no existe ninguna prueba o evidencia científica que asegure la existencia de una persona que haya perdido la vida”, comentó.
“No sabemos con exactitud ni existen pruebas concretas de cómo, cuándo ni donde desapareció o perdió la vida Narumi. No existen testigos presenciales del hecho. No existen imágenes ni grabaciones de las cámaras de videovigilancia que capten el hecho, aún existiendo 29 cámaras en todo el campus”, añadió.
“Según la prensa de la época, existe una imagen de una cámara de la residencia universitaria que capto a Nicolás saliendo solo y con su maleta de equipaje del edificio en la madrugada de ese día. ¿Qué pasó? Lo que grabó la cámara desapareció y ésta fue retirada del edificio”, señaló.
“Tampoco se encontró ningún arma homicida, ni se encontraron huellas de ADN de Narumi en el vehículo que utilizaba Nicolás para movilizarse esos días. Ni en el portamaletas ni en los asientos traseros”, detalló.
“Hacen ver a Nicolás como muy inteligente para algunas cosas (cuando les conviene para reafirmar su hipótesis) como la planificación del delito, por ejemplo, y muy bobo para otras como el ir pagando con tarjetas todos sus gastos en el viaje. Una persona medianamente inteligente que viaja con ese propósito no cometaria el error de pagar con TC en cada lugar que está”, destacó.
“Todavía no señalan con evidencias concretas para qué se utilizó el combustible con el bidón, fósforos y cerilla en la comisión de este supuesto delito”, sostuvo.
Sobre el cuerpo de Narumi Kurosaki
Cabe recordar que de acuerdo al fiscal Étienne Manteaux, la víctima fue asesinada en su habitación el 5 de diciembre entre las 3:15 y las 3:21 de la madrugada. El persecutor aseguró que el homicidio fue por asfixia y que el cuerpo fue arrojado al río Doubs, según su “hipótesis más probable”.
Sobre esta conclusión, Humberto Zepeda sostuvo que “se buscó por muchos días en el bosque, lugar donde se supone la llevaron (…) y también en el rio Doubs y no se encontró absolutamente nada”.
Además, denunció que “no se hizo ninguna reconstitución de escena (...) sino que todo fue desde la oficina de un policía. Al menos en 4 ocasiones, ingresaron personas al dormitorio de Narumi antes que ingresaran los investigadores, incluido el novio francés”. En este sentido puntualizó que “el sitio del suceso estaba absolutamente contaminado, habían sido arregladas muchas cosas”.
Respecto a esta nueva instancia que se dará durante este martes, comentó que “cuando una persona es inocente, pero es juzgada en otro país, con otro idioma, otras leyes y otras costumbres, es muy difícil todo”.
“Es muy cuesta arriba, pero en nosotros siempre existirán fuerzas para luchar y lograr comprobar la inocencia de nuestro hijo. Apostamos por la verdad y la justicia”, concluyó.
Es importante destacar que la defensa de Zepeda cuenta con dos testigos que aseguran haber visto a Narumi Kurosaki con vida días después de su desaparición, testimonios que ya habían sido descartados por la policía francesa.