"A mi sobrino alguien lo sacó por maldad", sentenció Jorge Escobar, hijo del hasta ahora único detenido por la desaparición y muerte del pequeño Tomás Bravo Riquelme, cuyo cuerpo fue encontrado el pasado viernes en el camino de un fundo en Lebu, Región del Biobío.
Entrevistado por el programa Bienvenidos, el joven que lleva el mismo nombre del tío abuelo del pequeño de 3 años y siete meses, quien se extravió cuando estaba al cuidado de éste, afirmó la inocencia de su padre en este caso que ha remecido a la opinión pública.
"Para mí es inocente. Él me crió de chico, he dormido con él, crió a la mamá de Tomás y se estaba dando el trabajo de criar a Tomás. Fue la maldita mala suerte la que los separó", sostuvo, enfatizando que la familia está destrozada con este caso porque "él no es una persona mala y no hay nada que lo inculpe".
Respecto de las protestas, incidentes e intentos de linchar a su progenitor, Escobar contestó: "No sé que decirle a la gente que habla tan mal de mi papá. Pónganse en el lugar mío, piensen en la persona que los crió y si ven algo malo en esa persona".
"Mi papá es una persona buena de corazón, tiene sus defectos como cualquier ser humano, pero no es capaz de hacer algo así", añadió acongojado el hijo de Jorge Escobar Escobar, admitiendo que hay un quiebre con la madre de Tomás y la familia familia, a lo que suma que su abuela paterna sostiene que ellos saben lo que ocurrió.
El tío de Tomás Bravo contó que durante todos los días de la búsqueda del pequeño, su padre estuvo con él y que únicamente salió cuando la PDI lo citó a declarar a Lebú. “Yo andaba con él para todos lados, no lo dejé solo, siempre prestándole apoyo, mi familia completa”.
“Se sentía culpable”
Consultado sobre las sensaciones de su papá desde que desapareció su sobrino, Jorge Escobar narró que "se sentía culpable, decía que no debía haber dejado a su huachito solo ahí. Era el único error que había cometido, lo único que quería era que apareciera con vida no más".
"Teníamos la esperanza de que el niño iba a parecer con vida y que toda esta pesadilla se iba a terminar", acotó entre lágrimas.
Al mismo tiempo insistió que el tiempo transcurrido desde que ocurrió la desaparición y él dio el aviso, no alcanza para haber cometido el crimen que investiga la Policía de Investigaciones y que ha derivado en una serie de pericias al cuerpo de la pequeña víctima en el Servicio Médico Legal (SML), lo que ha retrasado su entrega para que puedan velarlo y sepultarlo.
"Cuando mi papá salió con el Tomás, eran tres minutos para las ocho; y cuando él llamó a mi prima para preguntarle si Tomás había vuelto a la casa, era como las 20:24 o las 20:25. Más de 30 minutos no pasaron", apuntó.
"A qué persona le va a dar el tiempo para hacer algo tan horrible e ir a dejarlo allá donde pillaron a mi sobrino", preguntó, añadiendo que el tramo desde el punto de extravío del menor hasta donde fue encontrado nueve días después no se puede hacer en línea recta, porque el predio colinda con el bosque Arauco y se debe dar u a vuelta extensa.
"Mi papá se quemó un pie y tampoco puede andar con mucho peso encima porque no tiene tendones ni ligamentos en esa pierna. Alguien sacó a mi sobrino, no sé si fue por maldad. No puedo entender a la personas que hizo eso, no creo que como familia hayamos hecho un daño tan grande".
“La PDI y la Justicia buscan cerrar el caso luego”
Requerido acerca de cuál sería su reacción en caso que su padre sea hallado culpable de los delitos cometidos contra su sobrino, Jorge Escobar, refrendó la inocencia de su padre y disparó contra la justicia y los agentes colaboradores de ésta.
"Tengo miedo que la PDI y la Justicia siempre buscan a quién echarle la culpa, cerrar el caso luego. Ellos no buscan justicia, sobre todo si los están presionando desde arriba, van a buscar algún culpable, cargarle toda la mata y que la gente en redes sociales y en todo Chile quede conforme. Tengo miedo que los responsables de esto estén riéndose de nosotros", cerró.
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