En el inicio inicio de las audiencias en el Tribunal Constitucional (TC) por el requerimiento ingresado por el Frente Amplio (FA) y el Partido Comunista (PC) contra la nueva Ley de Migraciones que impulsa el Gobierno, el jefe del Departamento de Extranjería, Álvaro Bellolio, respondió en duros términos a los cuestionamientos planteados por dicha colectividad.
A través de una entrevista con CNN Chile, Bellolio explicó que para el Gobierno el requerimiento del FA compromete los controles fronterizos ya que "plantea que cualquier extranjero que quiera venir a Chile, el Estado no puede limitar su movilidad, por lo tanto, deberíamos tener fronteras abiertas".
Según comentó el jefe del DEM, con este requerimiento no se podrían establecer visas especiales, como la que se estableció para Haití o Venezuela en su momento.
"Ellos (el PC y el FA) tienen una lógica maximalista de la libre movilidad. En los tratados internacionales y en el derecho internacional, lo que se establece es que un extranjero puede efectivamente salir del país del cual es nacional y una vez que él entra a otro país, se puede mover libremente, pero en ningún lado está esta lógica que un extranjero puede entrar a cualquier país sin restricciones".
Siguiendo con su punto, Bellolio sostuvo que como gobierno no pueden permitir el libre ingreso de personas ya que implicaría la afectación en la autonomía y rol del Estado sobre las personas que entran o salen de territorio nacional.
"¿Tiene el Estado el rol de poder definir quién entra y quién sale en sus fronteras? Si tenemos un millón de personas una vez que termine la pandemia, ¿debemos dejar que todos ellos entren libremente?", expresó.
El argumento de Bellolio, va en dirección opuesta a lo planteado desde el FA y el PC quienes buscan que el Estado no pueda exigir documentación específica según el país de origen, ya que podría conllevar a "arbitrariedades" por parte del Estado.
Ante esto, el funcionario de Gobierno sostuvo que "el mismo Frente Amplio fue al TC a tratar de evitar poner una visa de turismo a los ciudadanos haitianos. Ellos estaban muy contentos, muy orgullosos que cientos de miles de ciudadanos haitianos llegaran a Chile sin cédula de identidad y quedaran botados en la calle vendiendo obleas bañadas en chocolate en las esquinas".
Y agregó que lo que finalmente buscan es crear una especie de "turismo laboral": "Lo que ellos están tratando de hacer con estas condiciones es volver a lo que buscaron y no tuvo apoyo en la Cámara de Diputados, que es el turismo laboral".