El 7° Juzgado de Garantía de Santiago decretó prisión preventiva solo a uno de los ocho imputados como los eventuales responsables por las amenazas de muerte que recibió la fiscal Ximena Chong.
Se trata de Pablo Martínez Castro, quien era poseedor de una subametralladora UZI que fue encontrada por personal de la PDI cuando allanó distintos domicilios en el marco de la investigación de los mensajes hacia la persecutora. Además, fueron incautados otros elementos como cascos y chalecos tácticos.
Durante la audiencia de formalización, la jueza Tatiana Escobar indicó que existen los antecedentes necesarios para determinar la infracción a la ley de armas, al no tener el permiso para poseer ese objeto, que es considerado "un arma prohibida, en pleno funcionamiento, con todas sus municiones", según dijo el fiscal Francisco Jacir.
En tanto, los siete imputados restantes, identificados como Gabriel Jara Vivanco, Daniel Goldberger Garcés, Solange Aravena Méndez, Paula Narváez Orrego, Osvaldo Urcola Díaz-Valdés, Benjamín Morelos y Fernando Hasler Martínez, quedaron solo con la medida cautelar de firma mensual y prohibición de acercarse a la víctima y su familia.
Para llegar a tal decisión, la jueza sostuvo que, en base a los antecedentes y sus intachables conductas anteriores, se negó la prisión preventiva al ser considerada una medida desproporcionada.
Respecto a los hechos, se detalló que el 6 de octubre pasado, siete de los ocho involucrados salieron de una oficina ubicada en Las Condes con dirección al domicilio de Chong para luego entregar la misiva con amenazas al hijo de la víctima.
La investigación tendrá una duración de 90 días.
Revisa a continuación el momento de la condena:
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