En un sorpresivo y devastador ataque, el grupo palestino Hamas llevó a cabo una incursión coordinada en el sur de Israel, dejando al menos 22 personas muertas y alrededor de 300 heridas. Este acto de violencia ha sido calificado como el peor ataque en años en territorio israelí y ha desencadenado una escalada de tensiones en la región.
El ataque se produjo durante el feriado nacional de Simjat Torá y consistió en el lanzamiento de aproximadamente 2.500 cohetes explosivos desde la frontera y la infiltración de militantes de Hamas en al menos 7 puntos cercanos a la franja de Gaza. Los atacantes lograron evadir el muro divisorio utilizando ultraligeros y embarcaciones para llegar por aire y mar.
Netanyahu declaró la Guerra a Hamas
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó la situación como “una declaración de guerra” y advirtió que los responsables “pagarían un alto precio”. El ataque, que duró cerca de 6 horas, afectó múltiples áreas de Israel y dejó a decenas de personas en estado crítico, según informes médicos.
Hamas, que actualmente lidera el gobierno palestino, ha publicado videos que muestran a militantes recorriendo las calles con vehículos militares israelíes capturados y al menos un soldado de israel muerto. También afirman haber capturado a tres soldados israelíes vivos, aunque esta información no ha sido confirmada por las fuerzas armadas.
La motivación detrás de este ataque a gran escala aún no está clara, pero la tensión entre Hamas e Israel había ido aumentando en las semanas previas al evento. La incursión coincidió con la festividad de Simjat Torá, lo que trajo recuerdos de un conflicto similar hace 50 años.
Ambas naciones han elevado el tono de sus declaraciones, y la situación sigue siendo altamente volátil. Las autoridades israelíes han convocado a reservistas con entrenamiento militar en medio de una creciente preocupación por la escalada del conflicto.