Pakistán vive momentos de dificultad extrema. A la suma de la lamentable pérdida de muchas vidas humanas, el país sufre precariedad total de infraestructura para contener la situación que han dejado las inundaciones.
Hay personas durmiendo en carreteras, caminos y sitios baldíos. La crisis sanitaria es insostenible y las autoridades de salud advierten, además, brotes de malaria.
La ministra pakistaní del Cambio climático, Sherry Rehman, declaró que se vive "una crisis de proporciones inimaginables" y atribuyó la causa al calentamiento global.
Todos los años Pakistán recibe las lluvias manzónicas, de junio hasta septiembre, sin embargo esta temporada han caído de manera brutal devastando al territorio.
Pakistán o República Islámica de Pakistán, es un Estado soberano emplazado en Asia del Sur. Posee una población de más de 200 millones de personas y es el quinto país más poblado del planeta.
Colaboración internacional
La Organización Mundial de las Naciones Unidas, en apoyo Pakistán, lanzó, junto a las autoridades del país, un llamado de urgencia global para recaudar 160 millones de dólares para financiar la ayuda de emergencia.
"Deseamos la misericordia de Alá a los que perdieron la vida, transmitimos nuestras condolencias al amigo y hermano pueblo y al Gobierno de Pakistán y deseamos una pronta recuperación a los heridos. Türkiye ha iniciado los preparativos para prestar ayuda necesaria a los hermanos pakistaníes afectados por las catástrofes de las inundaciones, y está previsto el envío de un avión turco con ayuda humanitaria a Pakistán" Comunicó la embajada de Turquía.
La comunidad internacional se está organizando para apoyar al territorio, sin embargo la tragedia que padece la región requiere de gran colaboración mundial. Cabe recordar que son más de 33.000.0000 de personas desplazadas, que han quedado sin hogar, ni recursos, tras las lluvias manzónicas.