En respuesta a la detención del rapero Pablo Hasél por críticas a La Corona Española ocurrida el día de ayer han habido disturbios a lo largo de toda la tarde y noche, y se han sucedido en distintas ciudades españolas y con especial intensidad en Cataluña, según reportó la Vanguardia.
Los incidentes más graves se han vivido en Vic, donde una turba ha tratado de asaltar la comisaría de los Mossos que ha sido rodeada y atacada con una lluvia de objetos que ha destrozado vidrios del exterior.
Tras la detención del rapero por orden de la Audiencia Nacional, los comités de solidaridad con el cantante han convocado marchas de protesta en numerosas ciudades catalanas y capitales españolas.
La concentración de Barcelona ha sido la más numerosa, con una multitud de personas que al arranque han protestado de manera pacífica por el arresto del músico. Prácticamente llevaba una hora la manifestación cuando el ambiente se ha empezado a crispar y un grupo de personas se ha escindido y desplazado hasta el centro provocando destrozos en mobiliario urbano, quemando motos estacionadas y saqueando sucursales bancarias.
Al menos dos jóvenes han resultado heridas, y una de ellas presentaba una lesión de gravedad en un ojo, según ha informado el Servei d'Emergències Mèdiques de Catalunya.
Los Bomberos de Barcelona han trabajado toda la noche sofocando contenedores, motos y barricadas incendiadas que se han levantado al paso de la protesta. En Barcelona la policía había detenido a las diez de la noche a al menos a dos personas.