Canadá se convirtió en el primer país de América en confirmar la aparición de la cepa detectada en Reino Unido, encendiendo las alarmas de una eventual propagación en ese país y al resto de la región.
Así lo dieron a conocer autoridades médicas de la ciudad de Durham, provincia de Ontario, donde una pareja dio positivo a la variante que mantiene a Gran Bretaña aislada del resto de Europa y de otras latitudes con la cancelación de vuelos como medida de precaución.
Según explicó en un comunicado la directora médica asociada de salud de Ontario, Bárbara Yaffe, las personas portadoras de la cepa británica del coronavirus no tienen historial de viajes, ni tampoco se han expuesto a contactos estrechos.
La facultativa agregó que los afectados están en cuarentena y siguiendo todos los protocolos de salud indicados por las autoridades locales.
"Esto refuerza aún más la necesidad de que los ontarianos permanezcan en casa tanto como sea posible y sigan todos los consejos de salud pública, incluidas las medidas de cierre en toda la provincia que comienzan hoy", sostuvo la experta.
La variante también se ha detectado en otros países como Francia, España, Italia, Japón, Dinamarca, Bélgica, Australia y Holanda.
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