La salud mental y los problemas relacionados a ella son cada vez más comunes entre la población mundial, sobre todo cuando hablamos de depresión, ansiedad o trastornos de la alimentación.
Pese a que es algo que nos ha afectado desde siempre, hoy en día, con la reiterada exposición a situaciones de estrés o de malestar social, es sumamente importante saber cuándo detectar que estamos mal mentalmente, ya que su temprano tratamiento podría ayudarnos increíblemente.
Bien sabemos que la salud mental incluye nuestro bienestar emocional, psicológico, social y también físico, dado que los reiterados cambios en nuestro humor puede afectar nuestra apariencia, dando origen a trastornos como la anorexia o bulimia nerviosa.
¿Por qué es importante la salud mental?
Mantener en buen estado tu salud mental es sumamente importante porque te puede ayudar a:
Enfrentar situaciones complicadas de la vida.
Enfrentar situaciones de alto estrés.
Mantener buenas relaciones amorosas, familiares y laborales, entre otras.
Trabajar productivamente.
Alcanzar tu potencial.
Amarte y respetarte a ti mismo.
¿Qué situaciones o enfermedades pueden afectar mi salud mental?
Situaciones de estrés o de riesgo.
Los genes familiares.
La experiencia de vida, sobre todo si ha sufrido episodios de abuso durante la infancia.
Si fue expuesto a algún producto químico o tóxico durante el embarazo de la madre.
Consumo de drogas o alcohol.
Padecer alguna enfermedad grave que afecte su día a día.
Estar aislado o no tener amigos.
Factores biológicos.
Lesiones cerebrales traumáticas.
Es importante mencionar que los trastornos mentales son comunes, por lo que cualquier persona podría padecerlos si se enfrenta a alguna de estas situaciones.
¿Cómo cuidar nuestra salud mental?
El pasado 10 de octubre, cuando se conmemoró el Día Mundial de la Salud Mental, el Gobierno de Chile entregó 7 recomendaciones que podrían ayudarte a cuidar tu salud mental.
Conócelas a continuación:
Prioriza el buen dormir: Te ayudará a mejorar tu estado de ánimo, la concentración y a desempeñarte de mejor manera.
Preocúpate de tu alimentación: Comer bien es fundamental, ya que una ingesta adecuada de alimentos y agua puede mejorar la regulación emocional.
Haz deportes: La actividad física te ayudará a mejorar la autoestima y el estado de ánimo. Además, podrás tener más energía en tu día a día.
Haz lazos: Esto te ayudará a sentir tranquilidad, compañía y alivio.
Conversa cada vez que te sientas mal: Conectar con otras personas te ayudará a desahogarte con mayor facilidad.
Aprende a manejar el estrés: Esto lo puedes lograr con ejercicios, meditación e incluso conversando con quien te sientas más cómodo o cómoda.
Disfruta.
Es importante mencionar que si te encuentras muy mal mentalmente o sin salida, lo que debes hacer es acudir a un profesional que pueda ayudarte, guiarte o tratarte, jamás automedicarte, ya que esto podría agravar tu situación.
