Hace un par de semanas el técnico del Cádiz, Paco López, reveló en conferencia de prensa que su decisión de no convocar a Tomás Alarcón al partido frente al Córdoba se basó puramente en una pelea del chileno con su compañero maliense Rominigue Kouamé que habría tenido lugar hace un poco más de un mes. Desde entonces, ninguno de los dos ha vuelto a entrenar con el equipo y menos ha sido considerado para volver a jugar, situación que no se ve que vaya a cambiar pronto.
El cuadro del chileno está más cerca del fondo de la tabla que de la cima, y este sábado enfrentará un duelo ante un rival directo por la zona baja, el Deportivo La Coruña, para el que Alarcón nuevamente no será considerado, ya que en los primeros entrenamientos de la semana, tanto el chileno como Kouamé, entrenaron apartados del plantel.
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“El entrenador mantiene el castigo sobre los dos medios después del incidente que protagonizaron un día antes del encuentro ante el Real Oviedo correspondiente al 14º capítulo liguero. Se han quedado fuera de los últimas convocatorias y se desconoce cuándo volverán a la normalidad”, indicó el Diario de Cadiz tras conocer la realidad de ambos volantes en el cuadro gaditano.
Alarcón lleva dos meses sin jugar
Pese al incidente del volante chileno con Kouamé, Alarcón ya lleva dos meses completos sin ver acción en LaLiga Hypermotion, ya que poco a poco sumaba minutos y comenzaba a ganarse un puesto en el equipo, al menos ingresando en los segundos tiempos, pero una lesión lo dejó fuera de las canchas durante tres semanas.
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Tras ser habilitado para volver a jugar se produjo el incidente con Kouamé, y Alarcón tuvo que volver a resignarse a no jugar, esta vez por temas extradeportivos. Luego del partido ante el Granada del fin de semana recién pasado, el chileno acumuló 11 partidos sin ver acción, y todo indica que su futuro en el Cádiz tiene los días contados, esperando por el mercado de fichajes del invierno europeo para tomar un nuevo rumbo.