El Betis de Manuel Pellegrini sigue con su gira de pretemporada en Estados Unidos, donde jugó contra el Liverpool el viernes pasado y este miércoles lo hará ante el Manchester United en otro encuentro de exhibición. Eso sí, el duelo ante los Reds dejó al desnudo una de las necesidades más urgentes del Ingeniero: la falta de un refuerzo en ataque.
El único delantero neto con el que los verdiblancos cuentan actualmente es el canterano Marcos Fernández, de 21 años, que fue utilizado por el Ingeniero ante el equipo de la Premier, pero todo indica que solo tendrá minutos durante la pretemporada, por lo que el técnico chileno buscó otra solución e intentó con Chimy Ávila como centrodelantero.
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En el transcurso del partido ante el Liverpool, el Ingeniero tuvo que reconvertir al extremo argentino en delantero centro, y todo indica que esa seguirá siendo su función, al menos hasta que llegue algún refuerzo especialista en el puesto. Ávila ya tiene experiencia jugando como 9, pese a no ser el lugar donde más cómodo se sienta, por lo que al menos el técnico chileno tiene un respaldo.
Dos salidas y una lesión complican al Ingeniero en delantera
Durante la temporada pasada el cuadro bético sufrió con la partida de Borja Iglesias al Bayer Leverkusen y al término de la misma, con la salida de Willian José al Spartak de Moscú. Entre los dos dejaron 80 goles durante su estadía en Heliópolis, y Pellegrini aún no encuentra reemplazantes.
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Incluso, uno de los jugadores que el Ingeniero solía ocupar como delantero centro cuando la necesidad del partido lo ameritaba es Ayoze Pérez, pero el español aún no se reintegra al equipo luego de haber estado concentrado durante toda la Eurocopa con España.
A eso se suma la lesión de Cédric Bakambú, que tiene fecha de retorno a las canchas para fines de septiembre, con ocho fechas de LaLiga ya disputadas, lo que significaría ceder bastante terreno en la competencia si no llega un nuevo fichaje con las características de 9 neto.