El peligroso drama que rodea al Godoy Cruz de Thomas Galdames en el fútbol argentino

El duelo entre el Tomba y San Lorenzo se suspendió por incidentes en las tribunas y destapó una interna entre dos facciones de la barra del conjunto mendocino.

Thomas Galdames era titular en el duelo que iba 1-1 antes de que el árbitro decidiera parar el partido.

El flagelo de la violencia en el fútbol de vez en cuando vuelve a afectar al deporte y esta vez fue Argentina el país que regaló una lamentable postal cuando el duelo entre Godoy Cruz de Thomas Galdames y San Lorenzo fue suspendido por incidentes en la tribuna.

El lateral chileno era titular en el cuadro mendocino, que recibía al Cuervo por la fecha 3 de la Liga Profesional. Cuando el resultado estaba 1-1, la policía ingresó a una de las galerías para reprimir una pelea entre facciones de la barra, en una imagen que dio la vuelta al mundo.

Así fue la suspensión del duelo entre Godoy Cruz y San Lorenzo:

A la espera de saber qué resolverá la AFA (Asociación del Fútbol Argentino) sobre la continuidad del partido, se han conocido más detalles de las razones de una pelea que tiene hoy en vilo al Tomba, club que a principio de año gozaba de un gran momento que lo llevó incluso a disputar la fase previa de la Copa Libertadores contra Colo Colo, pero ahora se hunde en sus propios problemas.

“La de este sábado fue una demostración de fuerza de un grupo de violentos que intenta tomar por la fuerza el poder de ‘ Los Glorianos’, la barra oficial controlada el clan Aguilera, un grupo de hermanos del barrio La Gloria de la capital provincial que tiene a dos de sus tres integrantes detrás de las rejas”, explicó el diario trasandino Clarín, desmenuzando la pelea que asusta a Mendoza.

“En abril de 2002, cuando el jefe de ‘La Banda del Expreso’, Sandalio Arabel fue asesinado a balazos a metros del estadio Feliciano Gambarte, los Aguilera se metieron en la puja por la conducción de la barra. Desde entonces, tomaron el control de los negocios derivados de la tribuna. Reventa de entradas, explotación de puestos linderos (estacionamiento, parrillas, merchandising trucho y otras bocas de recaudación) y principalmente distribución de drogas”, sigue desnudando el reportaje, que atribuye el reciente episodio a un ajuste de cuentas por aquello.

“La suspensión del partido fue una demostración de fuerza de una barra que quiere ser la oficial. Independientemente de las internas y los nombres propios, los que están fuera de la tribuna sienten que están más cerca del poder que todavía maneja a control remoto desde una celda de la prisión”, cierra el matutino en su edición digital, dejando en entredicho la localía del equipo de Galdames y le suma un complicado elemento extradeportivo a su presente.