¡Por expulsar a Guillermo Maripán! Árbitro francés vivió una pesadilla: “Tuve que…

En el duelo del Mónaco ante el Marsella, el juez Willy Delajod le mostró tarjeta roja al futbolista chileno, lo que no le gustó a los hinchas del cuadro del principado, quienes lo atacaron con dureza con mensajes a su teléfono y redes sociales.

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Willy Delajod es un nombre que muy pocos chilenos deben tener en su memoria. Definitivamente, prácticamente ningún fanático nacional sabe quién es este hombre, que curiosamente, luego de expulsar al nacional Guillermo Maripán vivió una verdadera pesadilla.

Seguramente, el bueno de Delajod, jamás pensó que una tarjeta roja en contra del seleccionado nacional le valdría pasar por uno de los peores momentos en su carrera como árbitro profesional. Si bien el episodio ocurrió ya hace varias semanas, fue ayer cuando el hombre de negro dio a conocer todo lo que debió vivir.

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El duelo terminó 2-2 y se jugó el pasado 27 de enero. En aquel compromiso, el chileno se fue expulsado a los 11 minutos tras una entrada contra Vitinha que causó mucha polémica en Francia, y que por supuesto, puso cuesta arriba el duelo para los monagescos ante la exescuadra de Alexis Sánchez.

Acosado por hinchas del Mónaco tras expulsión a Maripán

En una entrevista con el diario Dauphiné Libéré, Delajod comentó el drama que le tocó vivir inmediatamente después del partido.

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“Mi teléfono, disponible debido a mis actividades de agente inmobiliario, sonaba cada dos minutos. Recibí llamadas anónimas insultándome”, confesó el juez, dejando entrever que vivió días muy duros producto de este acoso, que no se quedó ahí.

Además, las quejas de los hinchas del Mónaco se trasladaron hasta las redes sociales del árbitro de 31 años, como él mismo confesó en la mencionada entrevista. “Tuve que enfrentar mucha oposición en las redes sociales, hasta el punto de pedirle a mi agencia de comunicación que borrara todos los mensajes de odio”, sostuvo.

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Finalmente, tuvo un mensaje repecto a lo duro que es experimentar este tipo de situaciones, a las que los jueces están, lamentablemente, acostumbrándose. Para concluir, apuntó que “cuando un club se siente agraviado, presiona con todo su peso a un árbitro que se encontrará solo contra 3.000. La gente piensa que el árbitro es indestructible pero no”.

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