El Real Betis de Manuel Pellegrini tuvo un partido para el olvido. En condición de local, cayó por 2-0 ante el Cádiz, obteniendo un pésimo resultado de cara al objetivo de clasificar a copas europeas, y que estuvo altamente condicionado por las expulsiones de Sergio Canales y Aitor Ruibal.
Además, Claudio Bravo nuevamente quedó fuera de once titular, hecho que deja en duda su continuidad en el cuadro verdiblanco. ¿La razón? El portero tiene en su contrato una cláusula de renovación automática, cuyo requisito era que el meta jugara 25 partidos en la presente campaña, algo que matemáticamente se ve complejo.
El compromiso comenzó cuesta arriba para los locales. Guido Pezzella debió abandonar el terreno de juego en el 22′ por lesión. Y por si fuera poco, Sergio Canales se fue expulsado en el minuto 38 por una fuerte falta sobre Rubén Sobrino.
Una vez reanudado el segundo tiempo, el Betis acusaría el primer golpe, debido a una mano de Juan Miranda en el área. El árbitro del encuentro sancionó penal a favor de los visitantes, y por gol lo cambió Rubén Alcaráz en el minuto 53.
El error que terminó por sepultar al Betis
Solo cinco minutos después llegaría el 2-0. Un grosero error de Aitor Ruibal en la salida propició una contra mortal del “Submarino Amarillo”. En carrera contra Rui Silva, Theo Bongonda cedió para Chris Ramos (59′), quien definió con el arco a su disposición para dar el golpe final en el Benito Villamarín.
Por si fuera poco, un minuto después el propio Ruibal protagonizaría una polémica acción, al agredir a Fali del Cádiz mientras protegía el balón. Un golpe en el rostro fue lo que bastó para que el cuadro heliopolitano se quedara con nueve jugadores.
Pésimo resultado para el Real Betis, que queda en sexto lugar con 45 puntos, esto tras el triunfazo del Villarreal ante el Real Madrid. Si bien aún está en puesto de clasificación a copas europeas, tiene solo cinco puntos de distancia con el Athletic Club.