Universidad de Chile se encuentra planificando la temporada 2023, donde algunos exjugadores formados en casa como Marcelo Díaz suenan como probables refuerzos. En ese sentido, hay un jugador que nació futbolísticamente en los universitarios que no vive un grato presente lejos del club.
Se trata de Gonzalo Collao, guardameta que actualmente figuraba en el NK Istra de Croacia optó por marcharse de su club en tierras balcánicas producto de la poca continuidad con la que contaba. El exazul disputó siete partidos en un año y medio, lo que refleja en alguna medida el triste presente del portero.
Collao era proyectado como uno de los "arqueros del futuro" en Universidad de Chile, y sobre su carta había mucha expectativa. Debutó en 2017 con 20 años, y en los universitarios pretendían hacerle un espacio entre Fernando De Paul y Johnny Herrera en ese entonces.
Una carrera en caída libre
En 2018 Gonzalo Collao partió a préstamo a Cobreloa, e incluso disputó amistosos por La Roja en la era Reinaldo Rueda. Pero todo cambió para él en 2019, cuando debido a la poca continuidad, optó por no renovar su vinculo con los estudiantiles para probar suerte en Europa, específicamente en el Extremadura de la Segunda División española.
En España comenzó la pesadilla, ya que el club se fue sumergiendo hasta desaparecer, dejando a la deriva al jugador. Es así como llegó a Croacia a mediados de 2021, donde tampoco pudo hacerse un espacio en el equipo. Su saldo es terrorífico ya que desde que dejó Chile en 2019, solo ha disputado 35 partidos, y perdiendo gran parte de su desarrollo ahora con 25 años.
Una de las opciones que tiene el jugador es regresar a Chile, donde puede optar a relanzar su carrera y volver a situarse como un proyecto importante para los arcos chilenos.
